Hoy en día, las griferías de baño y de cocina, así como duchas modernas se componen de materiales muy distintos para satisfacer las exigencias del mercado respecto al diseño y la funcionalidad. Para evitar daños y reclamaciones hay que tener en cuenta ciertos aspectos tanto en uso como en su limpieza.
No aplicar detergentes que contengan ácido clorhídrico, fórmico, acético o fosfórico.
No mezclar detergentes.
No se deben utilizar utensilios abrasivos.
La limpieza debe ser realizada según la dosificación y tiempo de actuación.
Realizar limpieza periódica para evitar depósitos de cal.
No rociar detergente sobre la grifería sino sobre los textiles.
Después de la limpieza aclarar con suficiente agua para eliminar restos de detergente.
No utilizar limpiadores a vapor, las altas temperaturas pueden dañar los productos.
Los residuos de aseo como jabón, champús y gel de ducha pueden dañar también los materiales por lo que se debe prestar atención a aclarar con abundante agua después del uso.
Esperamos que estos tips te sean de utilidad.